Valencia no solo es conocida por su rica paella y el cálido Mediterráneo que la acaricia. Esta vibrante ciudad está decidida a añadir una nueva faceta a su identidad: convertirse en un referente mundial de la música. Y es que el Ayuntamiento de Valencia ha tomado cartas en el asunto al lanzar tres nuevos grupos de trabajo dentro del ambicioso proyecto València Music City.

Iniciativa con visión global
La idea detrás de València Music City es simple pero ambiciosa: impulsar y promocionar a Valencia como un centro neurálgico de la música a nivel global. La ciudad busca atraer tanto a artistas como a eventos de renombre mundial, y por ende, a miles de visitantes que quieran disfrutar de la oferta musical. Pero, ¿cómo planean lograrlo?
Los tres grupos de trabajo recién formados son el corazón de esta estrategia. Cada uno de ellos se centrará en aspectos clave para hacer de Valencia una verdadera “Ciudad de la Música”.
Estrategia basada en la colaboración
Estos grupos de trabajo no funcionan de manera aislada. El Ayuntamiento, encabezado por María Oliver, ha hecho un llamado a la comunidad. Invitan a músicos, promotores, y a todos los que formen parte de la industria musical a colaborar. Un enfoque inclusivo y colaborativo es esencial para el éxito de esta iniciativa.
El primer grupo se encargará de dar forma a la “Marca València Music City”. Su misión es crear una identidad musical para la ciudad, que sea reconocida y respetada en todo el mundo. La idea es que, al hablar de música, Valencia no sea solo una ciudad más en el mapa, sino un destino de visita obligada para los amantes y profesionales de la música.
El segundo grupo se centrará en potenciar la infraestructura musical en la ciudad. Aquí es donde se decide dónde y cómo se deben invertir recursos para mejorar salas de conciertos, teatros y otros espacios para eventos musicales. Este grupo considera vital que los locales de música de Valencia estén más a la altura de las expectativas tanto de los artistas como de los espectadores.
Innovación y sostenibilidad en la música
Finalmente, el tercer grupo tiene la tarea de explorar y fomentar la innovación tecnológica y la sostenibilidad en la música. Este es quizás el aspecto más futurista y relevante de toda la iniciativa. La música, al igual que muchas industrias, necesita adaptarse a los cambios tecnológicos y las exigencias medioambientales actuales. Este grupo buscará maneras de incorporar tecnologías avanzadas como el streaming, la realidad virtual y la inteligencia artificial en los eventos musicales de la ciudad, mientras se asegura de que se haga de manera respetuosa con el medio ambiente.
La sostenibilidad no es una simple palabra de moda para este grupo. Impulsar prácticas ecológicas en festivales y conciertos es un componente fundamental. Esto podría incluir desde la reducción del uso de plásticos, hasta la implementación de sistemas de energía renovable para alimentar luces y sonido.
Expectativas y beneficios
El objetivo último de València Music City es crear un impacto duradero en la economía local. Los eventos musicales tienen un efecto multiplicador: generan empleo, atraen turismo y fomentan la inversión en infraestructura. Además, cuando una ciudad se convierte en un referente de la industria musical, se beneficia de un flujo constante de visitantes que desean consumir cultura y entretenimiento.
Pero hay más. Valencia ya cuenta con una rica tradición musical, y proyectos como este podrían dar un significativo impulso a los artistas locales. Promover el talento local en eventos internacionales no solo dará a conocer a Valencia, sino que también consolidará su posición como un vivero de creatividad y originalidad.
La incógnita del calendario
Aunque la idea está clara, todavía queda por determinar cuándo comenzarán a verse resultados palpables de este esfuerzo. Valencia ya está en el mapa, pero ahora busca subir al escenario y brillar con luz propia. El éxito dependerá de cómo se implemente esta estrategia y de cómo la comunidad, impulsada por estos tres grupos de trabajo, colabore para alcanzar el objetivo.
El camino a convertir a Valencia en un icono de la música está apenas comenzando. Con la visión y dedicación adecuadas, es muy probable que en unos años hablemos de la ciudad no solo por sus deliciosas naranjas, sino también por ser un epicentro musical.
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